💔 Tal vez lo más doloroso de afrontar el engaño o el hecho de que alguien desaparezca de nuestra vida, es que inmediatamente lo tomamos como si fuera nuestra responsabilidad. Saltan los pensamientos de cuestionamientos y culpas, quitando con esto responsabilidad a la otra persona. Somos atrevidos en montar a alguien en un pedestal, omitiendo con esto que hay escenarios que se escapan de nuestro control. Hay personas que están rotas, dañadas o que incluso están adaptadas a dañar, y nada de eso sería nuestra responsabilidad, al final sí, nos engañaron, confiamos, pero créeme, no siempre es posible detectar estas intenciones, no siempre hay señales, y también es necesario que seamos compasivos con nosotros al vivir estas experiencias tan dolorosas y desagradables. No todo es nuestra responsabilidad, no todas las situaciones son creadas por nosotros.
Qué opinas, te leo¡
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